El fallecimiento esta semana de Andreas Brehme trajo a los nostálgicos del fútbol de alrededor de los 90 el recuerdo de su paso por el Zaragoza o el mundial de Italia 90. A mí sin embargo me volvió a recordar a aquel Inter de Milán y liga italiana de por aquel entonces. Klinsmann, Matthauss y Brehme conformaban el trío de foráneos del Inter y aunque ese equipo no pasó a la historia como su vecino rossoneri, si que quedó en el recuerdo de los más futboleros de la época. Guardo con cariño en mi pequeña colección de material de aquellos años un póster de Don Balón del conjunto internista campeón de la Copa de la UEFA con los citados futbolistas alemanes.
La Serie A reunía a los mejores jugadores del mundo en una época donde solo podían jugar 3 extranjeros por club (por tanto el talento estaba más repartido) y éstos ganaban casi todos los títulos europeos -Copa de Europa, Recopa y Copa de la UEFA donde incluso jugaron varias finales entre ellos-. Han pasado a la historia el Nápoles de Maradona y el Milan de Sacci, pero es que además, ese campeonato reunía a lo mejor de lo mejor.
Costaba entender como un equipo de media tabla para abajo como el Torino podía fichar a un jugador del Real Madrid e integrante de la Quinta del Buitre cuando ésta estuvo en su apogeo. Martín Vázquez dejaba uno de los mejores clubes de Europa para unirse a los Scifo y Lentini en la escuadra turinesa. Pero era tal la superioridad y fortaleza del Calcio que era algo habitual en esos tiempos. Poco antes, Ricardo Gallego tambiénhabíapasado del conjunto madridista al Udinese así como Víctor Muñoz hizo lo propio del Barcelona a la Sampdoria.
Los citados Torino, Inter de los alemanes, Nápoles de Maradona (y Careca), y Milan de los holandeses Gullit, Van Basten y Rijkaard; más la Juve de Moller y Roberto Baggio, la Roma de Hasler y Voller, la Fiorentina de Batistuta, el Cagliari de Francescoli, el Parma de Asprilla y Brolin, la Lazio de Signori, la Sampdoria de Mancini y Vialli, etc. hicieron del Calcio algo muy superior a lo que es la Premier League hoy en día. El dominio era tan absoluto en resultados durante casi dos décadas que en esos tiempos quería que los italianos perdieran siempre en Europa, algo parecido a lo que me pasó muchos años después con el Madrid y el Barcelona. La Serie A tenía a los mejores equipos trabajados tácticamente junto con los mejores futbolistas del planeta distribuidos por todos clubes italianos. Era la NBA del fútbol.
Foto: Inter de Milán campeón de la Copa de la UEFA 90-91. Giuliano Bevilacqua. Póster de Bryan Torres (Fútbol Sin Humo)
La UD Palmas está de enhorabuena tras la gran noticia de renovación de su capitán. En el foco mediático a nivel nacional, y siempre por cosas positivas, Kirian es ese tipo de persona que para aquellos que somos padres queremos que tengan nuestros hijos como modelo de conducta. Al margen de su calidad futbolística y su gran rendimiento incluso en Primera división, el tinerfeño es educado, profesional y humilde.
Sin hacer leña del árbol caído y sin entrar en detalles, contrasta con lo que representaba el anterior capitán, Jonathan Viera, mago en el campo pero fruto de su altanería envuelto en más de una polémica fuera de él.
En una sociedad donde es casi imposible abstraerse de lo que hacen las celebrities a través de las redes sociales y televisión, siempre querré que para mí hijo haya referentes como Valerón, Pedri o Kirian.
Hace unos días se hizo viral un vídeo donde a Romario le preguntaban si era mejor o peor que algunos jugadores históricos y contestaba que solo estaban por encima de su figura Maradona y Pelé, y que estaba parejo el nivel en la comparación con Cristiano Ronaldo, Ronaldinho, Ronaldo y Messi. Todos los demás -Luis Suárez, Adriano Emperador, Rivaldo, Bebeto, Haaland, M'bappé y Neymar- eran peores que él.
Romario es probablemente, junto con Ibrahimovic, el futbolista con más ego y autobombo del planeta y desde hace muchos años tengo sensaciones encontradas con este jugador. Para la gran mayoría de los aficionados al fútbol el brasileño es uno de los mejores delanteros de la historia. Pero yo siempre he puesto en duda esa afirmación por haber completado un solo año (a nivel estelar eso sí) en equipos y ligas top de Europa.
La temporada 93-94 consagró merecidamente a oBaixinho como el mejor jugador del mundo después de la brutal temporada que hizo con el Barcelona y que coronó con el Mundial de Estados Unidos siendo la estrella del campeonato. Antes de eso, muchos años saliéndose en una liga menor como la holandesa y después del citado mundial de USA se fue por la puerta de atrás del propio Barcelona y Valencia. A principio y a final de su carrera triunfó en Brasil donde hasta Ronaldo metió goles con 50 kilos de más.
Cuando se hacen clasificaciones históricas de futbolistas casi siempre, o así considero yo que debería de ser, se tiene en cuenta las ligas donde ha jugado, equipos, rendimiento individual en esas ligas, títulos, años a buen nivel y la calidad. Un mínimo de cada categoría, porque si solo contara esto último no hay duda, Romario top 3 de la historia y el Mágico González le seguiría de cerca. Si sólo contaran los títulos, Arbeloa mejor que Ayala. Y si el factor predominante fueran los equipos y ligas donde ha jugado, Morata mejor que Batistuta.
A Romario creo que le falta trayectoria. Maradona o Ronaldinho por ejemplo, sin tener carreras longevas al máximo nivel, si que reúnen 5 o 6 años estelares cada uno de ellos. Rivaldo no era tan exuberante, pero que gran futbolista. Salvó los muebles una y otra vez al Barcelona de la época. Ronaldo, que decir del Fenómeno. Brilló en el Barcelona, Inter y Real Madrid. El jugador más atractivo de ver en mi opinión. Y la dupla Messi-Cristiano barren por mucho al protagonista de este articulo por ser considerados durante casi dos décadas los dos mejores futbolistas del mundo.
A estas alturas del texto, muchos ya habrán dejado de leer por haber profanado la figura de Romario. Pero quédense un poco más que por algo puse el título en interrogante. Mis afirmaciones anteriores me generan algunas dudas si tenemos en cuenta que las ligas europeas de finales de los 80 y 90 eran muy distintas de los que son ahora. El PSV Eindhoven era el reciente campeón de la Copa de Europa cuando fichó a Romario en el verano de 1988. Durante esos años y hasta casi final de siglo la Copa de Europa solo la jugaba el campeón de liga de cada país por tanto, aunque habían ligas más fuertes que otras el talento estaba más repartido que hoy en día. Y más si tenemos en cuenta que hasta 1997 no se aplicó la Ley Bosman, con lo cual, las ligas más potentes económicamente no fichaban a todo aquel que destacara mínimamente en cualquier club al solo poder alinear a 3 extranjeros simultáneamente sobre el césped. Otro argumento para los enamorados de Romario podria ser que además del Mundial, ganó 1 plataOlímpica y 2 Copas América, si bien por decirlo todo el certamen americano se jugaba cada dos años y algunas figuras renunciaban a la cita continental.
Como conclusión, podrá o no estar sobrevalorado, su temporada 93-94 es de lo mejor que han visto mis ojos pero desde luego, lo pongo por debajo de los citados Ronaldo y Batistuta, además de Henry y Roberto Baggio entre otros. Para gustos los colores y en fútbol como en la vida, tienen cabida -o deberían de tener- todas las opiniones, especialmente si se argumentan.
Foto: Romario tras conquistar el Mundial de USA 94
Vídeo: Romario se compara con otros cracks. Diario As